La Iglesia de Epicuro

El pensamiento epicúreo se basa en una apreciación racional y aceptación de la naturaleza. Por lo tanto, no tiene tiempo para los iconos, los símbolos y los rituales oscuros de la religión organizada. De hecho, es muy crítico con todas esas cosas.

Más a menudo is la religión engendra maldad y ha dado lugar a actos malvados so tan potente fue la Religión para persuadir a hacer el mal.
– Lucrecio, De Rerum Natura, Libro I. 84, 85, 101, traducción de A. E. Sementales

Es absurdo prestar atención cuidadosa al graznido de las torres y al canto de los gallos y a los cerdos que enraizan entre la basura … y tratar estas cosas como signos de viento y lluvia.
– Demócrito, traducción de Jonathan Barnes en Filosofía griega temprana

Además, no es necesario ser un epicúreo con tarjetas para seguir sus principios y vivir una buena vida Epicúrea. La «iglesia» epicúrea puede ser bastante invisible; tal vez sea aún mejor de esa manera.

Sin embargo, la gente a menudo encuentra útil y deseable el símbolo extraño (vea aquí una introducción a esta idea). Por lo tanto, he diseñado el emblema epicúreo que uso. Lo llamo el Icono de Tetrapharmakos. Es una combinación de las letras griegas tau (τ, τ) y phi (Φ, φ) de la palabra tetrapharmakos: τετραφάρμακος. La palabra tetrapharmakos significa básicamente la cura cuádruple o de cuatro partes (del griego tetra ‘cuatro’ y pharmikon ‘droga’).

No temas a Dios,
No te preocupes por la muerte;
Lo que es bueno es fácil de conseguir, y
Lo que es terrible es fácil de soportar.
El Tetrapharmakos

Esta cura cuádruple para las ansiedades que afligen a la humanidad está en el centro de la filosofía de Epicuro. Y por esa razón, se me ocurrió el Icono de Tetrapharmakos. Hay muchas versiones de ella dependiendo de la fuente griega que use y si uso letras mayúsculas o minúsculas. Siéntase libre de usar este icono usted mismo como una forma de recordar las enseñanzas clave de Epicuro y para ayudarlo a vivir una vida bendecida.

Notas al pie:
Lucrecio fue un seguidor romano posterior de Epicuro.
Demócrito vivió y murió antes de Epicuro, por lo que claramente no era un epicúreo. Sin embargo, Epicuro era el heredero del pensamiento ético de Demócrito. Véase, por ejemplo, Epicuro y Ética Demócrítica: Una arqueología de Ataraxia de James Warren.